SAN ROMÁN.- Un adolescente violento y celoso confesó asesinato de Nayelly, "Yo me fui con mi hija
aquí a dos cuadras nomas. Mi hija se quedó sola en mi casa" Es lo que
relató Maritza Apaza la madre de la quinceañera identificada como Nayelly sobre
la última vez que la vio con vida. " En la mañana la he dejado a mi hija
sana, alegre en su cama y a mi regreso la encuentro toda acuchillada",
narró sobre el fatal hecho.
Eran poco más de
las 10 de la mañana del día miércoles, cuando el adolescente
"Benyamin", toco la puerta de su casa en la urbanización Santa Clara
y, tras un breve forcejeo ingresaron.
Dentro de la
habitación de Nayelly, Benyamin Y. A. A. sacó su cuchillo y la asesino sin
piedad alguna. Fueron 15 heridas causadas por el asesino dos de las cuales
perforaron el cuello y el corazón de la adolescente.
Al poco rato, los
vecinos vieron que él huía con rapidez de la casa. En sus uñas y en una de sus
prendas llevaba rastros de sangre que, los efectivos pudieron encontrar
posteriormente a pesar de que se cortó las uñas y cambió la ropa.
Dos semanas antes
del asesinato, Nayelly dio por terminada su relación. Ella le había contado a
su madre que Benyamin, era controlador, celoso y violento. Lamentablemente
tenía toda la razón. Es más, tenía antecedentes policiales por agresión.
Después del
asesinato, Benyamin, puso un lazo de luto en sus redes sociales. Su adinerada
familia intentó protegerlo y evitar su detención, indicaron los deudos.
Finalmente, dentro
de la casa de Benyamin, los policías procedieron a buscar rastros de sangre que
hallaron en uñas y prendas de vestir. No le quedó otra que confesar su crimen.
El adolescente será
procesado con normas para niños y menores de edad pero la indignación de los
deudos quiere que lo juzguen como un adulto.