CHUCUITO.- Trece niños sonríen
y aplauden, el retorno de la familia Quispe Machaca a la comunidad de Lacahaqui,
aunque en el idioma materno sería “Laq’a jaqhi” ubicada en el distrito de
Huacullani, de la provincia puneña de Chucuito. Un pueblo que en el pasado
protegió sus tierras con la educación.
El domingo 8 de abril del
2018, no fue un día cualquiera, sino la conmemoración del centenario de la
I.E.N.E Lacahaqui, la escuela que formó a los hombres y mujeres, con ello
evitaron que terratenientes se apropien de sus fincas.
“En esta escuela aprendí a
leer y escribir, después me fui del pueblo (…)”, relata en su idioma nativo aimara
Daniel Quispe Machaca, educador y abogado de profesión,y ex diputado de la
Nación, quien junto a su familia llegó
desde Lima para celebrar los 100 años, de la escuela adventista de Lacahaqui.
Recuerda, que la escuela fue
creada en el año 1918, siendo uno de los promotores su abuelo materno Feliciano
Machaca, quien junto a Pedro Quispe Choque y Feliciano Almanza Condori,
hicieron posible la fundación de la filial de la escuela liberadora de
Utawilaya, la primera escuela indígena en Puno.
“Mi abuelo y otros dos
comuneros, se fueron hasta Platería para reunirse con Manuel Z. Camacho y el
pastor Fernando Stahl, en ese encuentro solicitaron el envío de un profesor”,
narra Daniel Quispe, indicando que la caminata duró tres días.
Cuenta que, en esos años, el
ayllu de Lacahaqui estaba rodeado de haciendas y había el temor que los
gamonales se apropiasen de sus tierras y, la única forma de defender era la
educación, la herramienta de la transformación.
En evocación a ese pasado
histórico de la educación indígena, Daniel, decidió volver al pueblo que le vio
nacer, esta vez acompañado de sus hijos y nietos, fue un emotivo reencuentro
con la familia y sus paisanos, con quienes estudiaron en la escuela Lacahaqui.
A los niños y niñas que
estudian en esa escuela, se les entregó camisetas de la selección peruana de
fútbol, buzos y sombreros. Los infantes mostraron su gratitud con aplausos y
vivas, es que ellos pocas veces reciben este tipo de obsequios.
Ese día la familia Quispe
Machaca, se reunió en la escuela que estudiaron y reflexionaron sobre el pasado
y el presente, los hermanos de Daniel, contaron sus anécdotas de la infancia y
las vicisitudes que les tocó enfrentar, es que vivir a más de 4000 m.n.m de
altura y lidiar con el crudo invierno de hecho, que es complicado.
Mientras, eso las mamás de los
colegiales preparaban la merienda. Una vez culminada la tertulia familiar,
todos degustaron el delicioso asado de alpaca y la watia, un plato típico de la
gastronomía andina.
“Lo que me preocupa que esta
escuela tenga pocos alumnos y lo peor no sepan hablar el aimara, retornaré el
próximo año y quiero verlos hablando tres idiomas: aimara, castellano e inglés
(risas)”, fue la recomendación de Daniel Quispe Machaca.
Lacahaqui, es un ejemplo de la
revolución indígena, hace 100 años se organizaron y fundaron la escuela
cristiana, evocaron la consigna del líder indígena Manuel Z. Camacho, el mentor
de la escuela adventista de Utawilaya de Platería. Se dieron la maña de
desafiar al yugo de terratenientes de la época, menos permitieron que sean
utilizados como sirvientes de los gamonales. (Jilata Daniel Aimara)