AZÁNGARO.- El pasado
9 de marzo se declaró fundado el requerimiento de prisión preventiva, en contra
del imputado Cesar Wilder Justo Juárez como presunto autor del delito de
lesiones leves subsecuente de muerte de Carlitos Moisés Larico Machaca,
universitario hallado sin vida en los exteriores de una discoteca en Azángaro.
Sin embargo, con auto de vista, de
fecha tres de abril, los jueces superiores de la Sala Mixta Descentraliza de
Azángaro conformado por Alberto Elías Cuno Huarcaya, Juan Mendoza e Iván Arias
- fundada la apelación - resuelven revocar la resolución de prisión preventiva,
quedando libre el imputado la anterior semana.
Froilán Larico Machaca, hermano del fallecido,
indignado por el hecho, refirió que su abogado no fue notificado de la
apelación ya sea en su domicilio procesal y mediante su correo. Tampoco fue
puesto de conocimiento por el Ministerio Público.
Por su parte el abogado de la familia doliente
Carlos Torres Rodríguez, indica que el imputado salió de la cárcel, teniéndose
como declaración inicial una confesión de haber cometido el delito. “Ha
reconocido que se ha peleado. Por su propia declaración ha merecido la prisión
preventiva” dijo.
Acusa al juez Alberto Elías Cuno Huarcaya de hacer
artimañas en el debido proceso. “Aduce de temporalidad, edad, ha buscado miles
de argucias, ha buscado argumentos para que le den comparecencia restringida”
dijo.
Por ello señaló que interpusieron una queja contra
los jueces de la Sala Mixta Descentralizada ante el jefe de ODECMA Puno, que
fundamenta indebida motivación, hay favorecimiento y acto de corrupción.
Mientras que la madre del fallecido, Francisca
Machaca de Larico pide justicia a los representantes del Poder Judicial. “Me lo
han maltratado, empujado. Ahora lo sacan al delincuente” dijo en su idioma
materno.